¡Fútbol, fútbol, fútbol!

Manu Chao y su Mano Negra dejaron algunas grandes canciones. En realidad, diría que Manu Chao es bueno, me gusta. El problema es que ha repetido ad nauseam una fórmula que solo alcanzó su culmen en el discazo Próxima estación: Esperanza (2007).
Os dejo hoy esta Santa Maradona del disco Casa Babylon (1994), muy apropiado para estos días de Eurocopa, en la que por lo pronto ya nos hemos cargado (algunos opinamos que de aburrimiento :) a los franchutes que tanto habrán coreado esta canción.
Volviendo a ver el vídeo, me pregunto qué opinarían las autoridades deportivas hoy en día de esta exaltación del deporte rey con imágenes de estadios con mareas humanas, bengalas y durísimas entradas, a mayor gloria del Pibe.

 

Sonisphere (Getafe 2012). Parte II.

Continúo la crónica, antes de se cumpla un mes desde los acontecimientos...

Sábado 26/5
Los cuatro jinetes.
Tras los compromisos familiares de la mañana y una siesta reponedora, era momento de regresar a Getafe para la jornada del sábado. Esta vez no iba a encontrame allí con nadie y disponía de mi tiempo con total libertad.

De nuevo, dificultad para aparcar, caminata bajo el sol, cervecita y adentro. El sábado había mucha más gente que el viernes, fácilmente el doble. Todo el recinto era una gran marea humana.

Aviones en el cielo de Getafe.
Al igual que el día anterior mientras esperaba, me acomodé a la sombra en una valla lateral desde donde tuve ocasión de seguir por las pantallas del escenario principal a Within Temptation (que tambié repetían de la edición de 2008) y Fear Factory. Nada que decir sobre ambos.

Llegado el turno de Slayer, era el momento de ponerme en pie y acercarme a la olla, más para ir ganando una buena posició con vistas que por ver a estos mitos de trash metal, de los que no conozco el título ni de una sola canción. Tralla y aguantar el tirón hasta que, con bastante retraso sobre el horario previsto, el acostumbrado It's a long way to the top (...de ciertos australianos...) por megafonía anticipaba la llegada de Metallica.

En esta ocasión el concierto se encuadraba dentro de la gira Black Album Tour, con motivo del 20 aniversario. Para celebrarlo, tocan el legendario disco completo en concierto, que pesa a tener ciertas reservas, lo reconozco, no se hizo monótono puesto que además tocaron algunos otros otros de sus éxitos en el arranque y el final del concierto.
One.


Qué puedo decir de Metallica que no lo haya dicho ya en las dos anteriores ocasiones. Que me enamoraron con su directo en 2008. Enormes. Qué espectáculo. Impecables en lo musical, con un sonido atronador y perfecto desde el primer instante, como en lo visual, con un escenario enorme a dos niveles, un fondo de escenario que era todo pantalla, pirotecnia y apabullantes luces, como el espectáculo de láser que emplean en One.


El setlist completo:
1. Hit the Lights
2. Master of Puppets
3. The Shortest Straw
4. For Whom the Bell Tolls
6. The Struggle Within
7. My Friend of Misery
8. The God That Failed
9. Of Wolf & Man
10. Nothing Else Matters
11. Through the Never
12. Don't Tread On Me
13. Wherever I May Roam
14. The Unforgiven
15. Holier Than Thou
16. Sad But True
17. Enter Sandman
- - - - - - 
18. Battery
19. One
20. Seek & Destroy


Tres veces los he visto ya en cuatro años y siempre diferentes, consiguen que cada vez termine uno deseando que vuelvan pronto.
Al término de Seek & Destroy y con las luces ya encendidas, era el momento de emprender el camino de regreso abriéndome paso entre la multitud, cansado pero enormemente satisfecho.
Los balones de playa de despedida.

Sonisphere (Getafe 2012). Parte I.

Bueno, a ver si pongo algo por escrito del Sonisphere antes de que se me olvide todo. Por supuesto, y como siempre, es mi opinión totalmente parcial y subjetiva.

Viernes 25-5-2012
Llegada a Getafe directo desde el trabajo y caminata de rigor, consecuencia de aparcar el coche a tomar por saco (y aún tuve suerte) y un recinto enorme y mal organizado que tiene una sola entrada y unas vallas que obligan a dar unos rodeos innecesarios, pero en fin, un par de cervecitas por el camino para aplacar la sed y listo.
Un recorrido por la explanada para localizar la venta de tickets de bebida, ver los puestos de merchandising y me senté a descansar y a esperar a algunos amigos. Yo iba por solo por Soundgarden, así que no presté mucha atención a los grupos que en esos momentos sonaban. Lo siento, pero es así.
Por curiosidad, me acerqué a ver un poco de Limp Bizkit, que suenan potentes pero la cagan en cuanto el cantante, vestido con algo a medio camino entre una batamanta con publicidad y un mono de F1 cinco tallas más grande, abre la boca y empieza a rapear. Nada, unos pesados.

Y en esto que, esperando a los amigos tardones, dio la hora en que empezaban la prueba de sonido en el escenario #2 Kyuss Lives!, a quienes sí tenía bastantes ganas de ver. Kyuss (pronúnciese como si rimara con garbanzus) era una banda de stoner rock de donde salieron nada menos que Josh Homme y Nick Oliveri para formar Queens of the Stone Age (que casualmente también actuaron en el Electric Festival 2008 en el mismo recinto) y estos Lives! son el resto miembros del grupo que decidieron continuar. Los he escuchado en disco y, sinceramente, no me terminan de convencer. En directo me gustaron más, para pasar un rato agradable escuchando buena música con un mini de cerveza fría en la mano.

Los siempre efectivos Offspring.

A punto de terminar éstos, y reunido ya con algunos amigos, me fui hacia en escenario principal donde estaban a punto de empezar Offspring. No se trataba solo de ir ganando posiciones hacia el escenario en preparación para Soundgarden, no. Es que Offspring son un clásico por méritos propios y ya me sorprendieron gratamente en su actuación del Electric 2008 que comentaba antes, con un directo potente, divertido y repleto de canciones sobre todo de sus grandes éxitos Smash y Americana, que aunque no quieras acabas cantando y coreando. Muy, pero que muy, buenos.


Por suerte, en cuanto terminaron Offspring hubo una desbanda en busca de bocatas que permitió acanzar hacia el escenario hasta casi alcanzar el dichoso pasillo de seguridad que además separa la zona VIP del resto de los mortales. Buena situación de cualquier modo.
Las espera a Soundgarden se hizo pesada, con muchas ganas pero también con mucho cansancio en el cuerpo, y retraso de la banda. Pero en cuanto aparecieron los de Seattle todo mereció la pena.

El sonido algo deficiente en las primeras canciones, bajo en general y de guitarra en particular, pero que fue mejorando según avanzaba la actuación, no impidió que gozara viendo a aquellos ídolos a los que durante años pensé que no vería. Chris Cornell con su asombrosa voz, Kim Thayil efectivo a la guitarra, Ben Shepherd potente al bajo pero bastante más estático que antiguamente, sin realizar sus histriónicos aspavientos, y sobresaliendo por encima de todos, Matt Cameron. Qué espectáculo el de este hombre. Con su pelo a flequillo y su cara de niño bueno, hay que ver cómo le pega a la batería. Porque no la toca, la pega con ganas y con toda la energía de su cuerpo. Sin tener un kit especialmente grande (¿verdad, Lars?) Matt consigue ser el centro de atención, con su particular estilo y ritmos poco habituales.



El setlist, corto pero efectivo, aunque claro, Soundgarden no tienen canción mala. Personalmente me quedé con muchas ganas de oír mi favorita, Mind Riot.

Setlist Soundgarden.
En general, buy buena sensación y buen sabor de boca con un final apoteósico lleno de distorsiones y delicioso ruido. 
Una noche para el recuerdo y una cosa tachada de la lista de 'Quizá algún día...'.


Era el momento de descansar un rato donde buenamente se podía y reponer líquidos. Al poco rato comenzó Machine Head y, tras escuchar un par de canciones a lo lejos, enfilé el largo camino de vuelta hacia el coche, esta vez con el frescor de la madrugada pero mucho cansancio encima, y además tenía que madrugar. El sábado me esperaba un día intenso.