Electric Weekend (Getafe 2008)

Día 1

Tras una difícil llegada a un abarrotado Getafe en los siempre complicados viernes madrileños, entramos al enorme recinto al borde de las 7 de la tarde y aprovechando que todavía no estaba abarrotado, nos arrimamos bastante al escenario para ir calentando motores.

Serj Tankian: Primera sorpresa

Sonido potentísimo y bien definido (que sería una constante durante todo el fin de semana en el escenario 1), gran voz y teatral puesta en escena del ex-System of a Down. Buena actuación y primera sorpresa para mí del festival. Tengo que escuchar más de este tipo, muy interesante.

Iggy & The Stooges: Un mito

Tenía ganas de ver al lagarto en persona. A pecho descubierto desde el primer momento y con sus extravagantes bailes, Iggy dio un buen espectáculo que sin embargo no era lo que me esperaba de un pionero de punk, con canciones excesivamente largas y premiosas.

Offspring: un agradable reencuento

Con algún parón por problemas técnicos, Offspring dieron un muy buen concierto, mejor de lo que me esperaba. Pese a no haberlos escuchado 'seriamente' en varios años, la mayoría de las canciones me eran como poco conocidas y sonaron muy bien, aunque siempre han tenido fama de no tener buen directo. Lo escuché con buen rollo, recordando aquellos irrepetibles veranos de estudiante del 94-95 con el Smash de banda sonora.

Rage Against the Machine:

Con algo de retraso salieron RATM al escenario principal. Reivindicativos y combativos como siempre, y por qué no decirlo, demagogos como siempre, se plantaron en el escenario principal vestidos con monos naranjas y capuchas negras siguiendo la moda Guantánamo y de esa guisa interpretaron la primera canción del concierto. Las proclamas se fueron sucediendo tras cada canción en un escenario decorado exclusivamente con estrellas rojas.

Es admirable cómo después de salir tarifando Zack de la Rocha por motivos artísticos y políticos, esta banda puede reunirse para sacar un poco más de tajada, seguir con su pose comunista y lograr que la gente aún se lo crea.

Sonido potente, eso hay que admitirlo, pero después de llegar a mi límite del cansino Zack a los tres cuartos de hora me fui al escenario 2 a coger sitio para el fin de fiesta...

Queens of the Stone Age: Decepción

A las 2:30 de la noche, en cuanto terminaron RATM en el escenario principal, salieron QOTSA a la carpa de escenario 2. Mira que lo siento pero la palabra que se me viene a la cabeza es Decepción.
El setlist se centró en sus discos 'azul y rojo', lo que seguro agradó a los fans de su primera etapa con Nick Oliveri, pero yo eché mucho en falta más material del excelente Lullabies y el reciente Era Vulgaris.
La actuación fue buena, quizá poco entregados y algo estáticos en el escenario, pero, y éste fue el gran problema, SONIDO NEFASTO estando en cuarta fila y completamente centrado en el escenario. La voz apenas se oía, el bajo tampoco, y los bombos mezclados con las guitarras lo engullían todo.

Quiero pensar que los problemas fueron por la mala acústica de la carpa (según me dijeron luego, el sonido hacia media distancia, sin ser de gran calidad, sí era algo mejor) pero a unos pasos del escenario donde no hay excusas para ecos y resonancias, el sonido tenía que haber sido mejor. Imperdonable.

Pese al buen arranque del festival, con este mal sabor de boca y bajo una fuerte lluvia que nos había perdonado durante todo el día, volví a casa con pocas alegrías y una rueda rajada.

Día 2

Con un cartel más metalero y con menos grupos de primera línea que el viernes, llegamos a los alrededores al recinto con un sol inesperado y que una vez más nos salvaría de la lluvia que se anunciaba para el fin de semana. Heavis de todo tipo y condición se preparaban para lo que nos esperaba, incluidos algunos sibaritas que degustaban Cardhu con hielo, como os lo cuento, y es que el buen rock es para gente de buen gusto...

Soilwork: Trash potente

Como en el día anterior, aprovechamos el recinto todavía no repleto para acercarnos bien al escenario para ver, oír y sentir a estos suecos que la Wikipedia cataloga como 'death metal melódico' (?). Potentes y muy agradecidos: 'thank you so fucking much' fue una frase muy celebrada.

Queensrÿche: heavy clásico

En la fatídica carpa del escenario 2 actuaron los veteranos Queensrÿche. Será que los vi con menos esperanzas, será que estaba a distancia media, qué será será, pero el sonido no me pareció tan dolorosamente malo como la noche anterior con QOTSA. Buena actuación de jevi clásico que se escucha con agrado.

Within Temptation

Nos alegramos un poco la vista con la única fémina sobre el escenario en todo el fin de semana. Rock gótico, sinfónico y comercial. Tipo Evanescence pero más potentes. Correctos.

Al igual que muchos otros miles de espectadores, decidimos saltarnos Machine Head, cuyos atronadores bombos resonaban a lo lejos, e intentar coger buen sitio para Metallica. Poquito a poco fuimos abriéndonos paso hasta conseguir un sitio bastante bueno prácticamente en el centro de la olla, y a esperar.

Metallica: El éxtasis del metal

Al filo de la medianoche comenzó a sonar el clásico de Morricone The Ecstasy of Gold que anuncia la aparición de Metallica en el escenario.

Lo que a partir de ese momento sucedió superó ampliamente mis expectativas, con uno de los mejores conciertos que he visto nunca: entregados desde el primer momento, en plena forma y con un setlist insuperable: justo lo que quería el público. Unos putos profesionales, y es que Metallica llevan mucha carretera...

Después de un arranque frenético con Creeping Death y Fuel, lleno de empujones y flagelazos de melenas sudadas en el cogote, llegó una mis favoritas: Ride The Lightning. Los grandes temazos clásicos iban cayendo uno tras otro sin respiro (apenas una frase de James Hetfield para recordarnos que había poco tiempo y mucho rock por hacer). Harvester of Sorrow, Wherever I May Roam, Justice for All... prácticamente nada de Load y Reload, absolutamente nada del fallido St. Anger.
Ni en mis más delirantes fantasías podía soñar con un setlist de ese calibre. Parecía como si no hubieran estado jamás en España y quisieran mostrar las joyas de la corona, o bien fuera una gira de despedida. Todo ello con un sonido atronador pero cristalino en el que cada instrumento se distinguía y se sentía a la perfección, y que ni siquiera los dobles bombos de Lars conseguían enmascarar.

Se fueron alternando canciones llenas de feeling (Fade to Black, Nothing Else Matters) con trallazos como Whiplash o Master of Puppets, hasta llegar a la pirotecnia y sonido de helicópteros que anunciaban One: el súmmum. Yo ya hacía reverencias a los pies de los reyes del metal cuando unos bises inesperados llegaron: las salvajes Last Caress y So What encadenadas, y un carismático James Hetfield metiéndose al público en el bolsillo con dos palabras tras el estribillo de So What:

Who cares about you?
Metallica does!

Cuánta razón tenía, y nadie lo dudaba después del espectáculo vivido: 'Hetfiel presidente' pedían algunos.

Haciéndose de rogar pero con pocas ganas de abandonar el escenario, remataron con un Seek and Destroy perfecto y sin prisas.

¿De verdad había ocurrido todo aquello o era un sueño? La respuesta estaba en la cara de absoluta felicidad de mi amigo Alfredo.

¿Exagero? Juzguen ustedes:

Intro: The Ecstasy of Gold
Creeping Death
Fuel
Ride The Lightning
Harvester Of Sorrow
Bleeding Me
Wherever I May Roam
Devil’s Dance
…And Justice For All
Fade To Black
Master Of Puppets
Whiplash
Nothing Else Matters
Sad But True
One
Enter Sandman
- - -
Last Caress
So What
Seek and Destroy